COMO ILUMINAR LA COCINA

El mejor consejo para iluminar bien una cocina, es aprovechar al máximo toda la luz natural. Pero cuando esta luz es insuficiente y no nos queda otra que recurrir a la luz artificial, lo mejor es tener claro nuestras necesidades dentro de la cocina para aumentar la seguridad, optimizar el gasto energético y crear un ambiente agradable, acogedor y practico.

Vamos a conocer los mejores consejos para que no tengas ningún problema a la hora de cortar, almacenar, o comer en tu cocina, empezamos:

Iluminación general

Las más utilizada en la cocina, su función será la de iluminar toda la cocina sin dejar sombras, ni zonas oscuras dentro de ella. Con ella deberemos iluminar tanto áreas de trabajo, como de almacenaje, como de office, por lo que se hace necesario que sea potente y este muy bien repartida.

Intentaremos emplear fuentes de luz potentes ya que necesitaremos unos 500 lúmenes por cada metro de nuestra cocina y de tipo led porque estarán mucho tiempo encendidas. Además en cocinas se recomienda temperaturas de color blancas entre los 3000 y los 4000 k, ángulos abiertos de más de 80º para difuminar bien la luz y si es posible con un alto índice cromático para distinguir bien los colores reales.

Dependiendo de si tenemos falso techo o no en ella, nos decantaremos por luces empotradas en el primer caso o por luces de superficie en el segundo.

Luces empotradas en el falso techo:

Es la mejor opción, siempre que se pueda claro, ya que las instalaciones nunca quedaran a la vista, ocupan menos espacio y dan más facilidad a la hora de repartirlas por toda la cocina.

• Focos empotrables: pueden ser fijos, pero lo mejor es que sean direccionales para cubrir las zonas mas importantes dentro de la cocina, difuminan mal la luz por lo que si optamos por esta opción tendremos que colocar un mayor número de ellos por toda la sala, los hay halógenos mejor opción si queremos que sean regulables o bien leds que nos permitirán ahorrar mucho más en la factura de la luz.  

Son bastante económicos y podemos tenerlos desde los 7€, pero para una cocina de unos 6 m² necesitaremos al menos colocar unos 6 de estos.

• Downlights: Amplían y reparten muy bien la luz,  por lo que es la mejor opción sobretodo en cocinas, como contrapunto tenemos que son más grandes que los focos y que no debemos colocarlos cerca de las paredes, ya que bajara su eficiencia a la hora de difuminar la luz. 

Su precio a partir de los 15€ y con 3 de ellos ya tendremos suficiente en una cocina normal.

Luces de superficie, cocinas sin falso techo:

• Fluorescentes: Los tubos de toda la vida, tanto alargados como con formas circulares, aun siguen siendo una buena opción a la hora de iluminar la cocina, tanto por su alta eficiencia iluminando, como ahorrando en la factura de la luz. No obstante esto solo se cumple para largos periodos de encendidos, más de 2 horas, ya que hasta esta duración, el fluorescente no alcanza toda su eficiencia, además, su apagado y encendido continuo reduce considerablemente su periodo de vida.
  
  
  
  
  Dependiendo de su tamaño y diseño tendremos lámparas fluorescentes desde los 30€ y cada tubo por 10€ aproximadamente. 
  
• Downlights en plafón: Funcionan igual de bien que los empotrados y su precio y calidad es parejo, quizás la mejor opción para no tener ningún espacio en penumbra, pero necesitaremos colocar al menos un par de puntos de luz para iluminar toda la estancia.



• Sistema con focos direccionales: Son una buena opción por su funcionalidad y diseño, se adaptan según las necesidades y solo requieren de una toma de punto de luz, en su contra podemos señalar que al no difuminar la luz por igual todas las zonas de la cocina, algunas pueden llegar a quedar con sombras o penumbra.
  
  
  
  
  Dependiendo del número de focos los podemos encontrar desde los 30€ teniendo normalmente que comprar las bombillas después a parte.

Iluminación directa

Durante estos últimos años, ha ido ganando en importancia al facilitar mucho las labores propias de la cocina. Las usaremos para desarrollar cada una de las tareas y podemos encontrar una gran variedad de soluciones en el mercado, flexibles y adaptadas a nuestros problemas. 

Entre ellas tenemos:

• Lámparas suspendidas: Las emplearemos en cocinas grandes sobre islas, barras y mesas aportan una decoración extra y a la vez hacen más acogedoras nuestras cocinas, pero generan sombras por lo que no podemos utilizarlas como iluminación general, conviene situarlas a no más de 75 cm de la superficie que haya debajo y según su mayor o menor uso recomendamos bombillas leds o halógenas respectivamente.
  
  
  
  
  
  
• Iluminación sobre encimera: En la actualidad existen muchos modelos y podemos encontrar desde regletas fluorescentes, paneles luminosos, hasta focos encastrados en la parte inferior de los armarios. Las regletas suelen estar comunicadas entre si y conectarse al enchufe más cercano, en el caso de los focos, o bien están conectados a la luz general desde el momento en el que se diseñó la cocina, o bien pueden funcionar con unas pilas y un sensor que enciende varios de estos focos a distancia. Las soluciones más modernas pasan incluso por sensor de movimiento, en donde bastara pasar la mano por debajo de la luz para encenderla (al ser leds no se calientan y no nos quemaran).
  
  
  
  
  El precio de las regletas es de unos 25€ y el de los focos de unos 15€.
  
• Iluminación en cajones y armarios: el desarrollo de la tecnología nos ha traído esta práctica iluminación, basta con abrir un cajón para que un sensor de vibración lo detecte y encienda un tiempo determinado la luz dentro del cajón, de este modo podemos ver bien lo que hay dentro o incluso podemos coger algo directamente del armario sin tener que dar ningún tipo de luz en la cocina. Suelen ir equipados con pilas por lo que no precisan ningún tipo de instalación, aunque también los hay que van conectados a la corriente.
  
  
  
   

En el mercado encontramos varios modelos,  desde pequeños y con luz puntual, 20€, hasta los modelos más grandes de tiras de luz que están entorno a los 30€.

Iluminación ambiental y decorativa

La utilizamos para decorar y hacer más cálida la cocina. Con ella acentuaremos la vajilla y cualquier otro tipo de menaje de calidad o  también podremos resaltar las formas y el diseño de la cocina.

• Iluminación en vitrinas: Con ella, daremos importancia a nuestro mejor menaje y a la vez podrá servirnos para encontrar, de manera más fácil, cualquier cosa de su interior. Este tipo de iluminación se suele resolver con focos leds de muy baja intensidad o bien con tiras leds que van conectadas a un interruptor y este a la toma de luz general.
  
  
  
  
  
  
  Pondremos especial atención a la hora de comprar los leds que sean de 220 a 230 voltios o bien que vengan con un transformador incluido, dado que este tipo de leds al ser de tan baja intensidad suelen tener potencias de bajo voltaje que no permiten su conexión a la red eléctrica de manera directa.
• Iluminación decorativa: Para conseguir dar más confort y profundidad o altura a la cocina, utilizaremos este tipo de iluminación en distintas partes de la sala. Podremos optar por colocar luces puntuales en la parte superior de los armarios, ancladas a ellos, hacer un barrido con focos o tiras de leds en el techo, cercanos a la pared, o en la parte baja de los armarios para iluminar su zócalo, o en la parte inferior de la encimera  integrados en los armarios. 
  
  
  
  
  
  El precio de las tiras de leds anda en torno a los 10€/m y el de pequeños focos de baja potencia esta por los 5€/ud. 
  

Y ahora que ya sabes los mejores métodos para iluminar tu cocina ¿Piensas que tienes suficiente luz en tu cocina a la hora de preparar la comida?¿Piensas que son funcionales las luces dentro de cajones y armarios para buscar cosas, o realmente no son necesarias?